«PACTE = PP»

     Si se pudiera apartar o aparcar la irresponsabilidad de «meter la mano en la caja», y la penosa imparcialidad derivada de la imposición nacionalista, aquí, en las Islas Baleares, se podría afirmar, sin riesgo alguno a equivocarse que el «Pacte» en nada se diferencia del «PP». Renegaban de Son Espases para luego alabarla. No querían más autopistas para luego construir más. Detestaban el segundo cinturón para luego desearlo más que nadie. Acusaban de electoralista la estrategia en la «estación intermodal» para luego actuar de la misma forma en el mismo proyecto. Recusaban la Radiotelevisión pública IB3 para luego apostar por el mismo modelo. Aconsejaban reactivar «políticas sociales» a través del sector turístico para luego comer en sus manos, mirar hacia otro lado y bendecir más camas. Denunciaban la pérdida democrática que acompaña cualquier turbio escaño para luego felicitarle y felicitarse. Y así …

     Siempre sospeché que las Islas Baleares eran territorio feudal y de derechas, ahora con la evolución real de sus incógnitas, que confirman la fórmula Pacte = PP, tan solo me vienen a dar la razón.

Madrid, 25 de diciembre de 2008

http://perso.wanadoo.es/venytorres/index.htm

LA CLASE POLÍTICA BALEAR (2ª PARTE)

     La partitura de la clase política balear bien se podría titular «Entre ladrones y mentirosos» y cuando digo «clase política» me refiero a algunos altos cargos que representan a los partidos políticos que están o han estado en el Govern. Pues estoy convencido que entre los otros altos cargos, cargos medios e inferiores, hay un elevado nivel de honestidad. Entre las calamidades que se pueden en este cajón desastre llamado Baleares, encontramos estos botones de muestra: Rasputín, Bitel, Mapau, R. de Santos, Turisme Jove, … para el PP; Son Espases, Segundo cinturón, IB3, … para el PSIB; Can Domenge, Son Oms, … para UM; Complejo Formentor, Villa Cortina, … para el resto de nacionalistas. Hoy y ayer, Baleares aparece como un seguro refugio de algún que otro Capitán Garfio y Pinocho. Parece mentira que la ciudadanía balear permita tal grado de surrealismo ¿por qué será? … quizás por miedo. La historia nos ha enseñado que cualquier proyecto vital donde aparece «el miedo» está condenado al fracaso. Que alguien me explique las bondades del seny mallorquín.

Palma de Mallorca, 14 de septiembre de 2008

http://perso.wanadoo.es/venytorres/index.htm