INCRÉDULOS O HIPÓCRITAS O INCOMPETENTES O TODO A LA VEZ
El día 12/03/09 escribí "Siempre advertí (con conocimiento de causa) que en esta legislatura no se iba a aprobar la nueva ley de la radiotelevisión pública de las Islas Baleares. Lo traía el PSIB en su programa electoral pero, como con Son Espases, ha quedado en agua de borrajas, y ahora más que IB3 se ha convertido, les guste o no a algunos, en la cuarta conselleria de UM".
El día 6/05/09 escribí "Cuando Antich fue a la caza del voto, no dudó en proclamar, a todo aquel que le quiso escuchar, que el nuevo modelo de IB3 que perseguía sería una fiel imagen de la reciente Corporación de Radio y Televisión Española S.A. Es decir: apostaba por nombrar un director general consensuado por todos los grupos parlamentarios; por la alta profesionalidad de los miembros del Consejo de Administración; y por un riguroso control de contenidos, a través del Consejo Audiovisual, dentro del marco: derechos y obligaciones constitucionales".
Y el día 1/08/09 escribí "La portavoz del ejecutivo autonómico, Joana Barceló, nos engaña al afirmar que la aprobación del contrato-programa de IB3 será la ‘base del nuevo modelo de televisión pública’, y nos engaña por la simple razón de que ningún modelo de televisión pública que se precie, léase BBC o la actual RTVE, ha empezado a fundamentarse o a construirse así, por el tejado, cosa que pretende y, sin ningún género de duda, llevará a cabo el PSIB y compañía. La experiencia, y el conocimiento del medio, me han enseñado: que todo buen modelo público de medios de comunicación debe cumplir, y en este orden, los siguientes requisitos:
1º.- El nombramiento del Director General debe elegirse entre los mejores currículums profesiones en la materia, requisito que, en la actual IB3, no se cumple -el currículum del bachiller A. Martorell se reduce a haber sido Jefe de Comunicación de UM-.
2º.- El nombramiento del Director General será consensuado por el Parlament y necesitará de una mayoría cualificada de 2/3 ó 3/5 del mismo para proceder a su nombramiento, requisito que, en la actual IB3, no se cumple -el nombramiento de A. Martorell, como Director General de IB3, por el Parlament fue el fruto de tan solo los votos favorables de los miembros del Pacte, es decir por mayoría simple de la Cámara-".
1º.- El nombramiento del Director General debe elegirse entre los mejores currículums profesiones en la materia, requisito que, en la actual IB3, no se cumple -el currículum del bachiller A. Martorell se reduce a haber sido Jefe de Comunicación de UM-.
2º.- El nombramiento del Director General será consensuado por el Parlament y necesitará de una mayoría cualificada de 2/3 ó 3/5 del mismo para proceder a su nombramiento, requisito que, en la actual IB3, no se cumple -el nombramiento de A. Martorell, como Director General de IB3, por el Parlament fue el fruto de tan solo los votos favorables de los miembros del Pacte, es decir por mayoría simple de la Cámara-".
Por todo lo escrito fueron muchos -todos aquellos que se autodefinen «progresistas»- que me tacharon de agorero, insolidario y antisistema. Pues bien, hoy, por desgracia para mi, los hechos me dan la razón: El Govern aprueba que el nuevo anteproyecto de la Ley del Ente Público de Radiotelevisión de Baleares no entrará en vigor antes del 1 de enero de 2011, o lo que es lo mismo, M. Martorell -destacado militante de UM- será director general de IB3 como mínimo hasta final de esta legislatura.
¿Qué le vamos a hacer? Ya lo dije, y recuerdo haberlo escrito en su día: "La ciudadanía balear -incluidos los profesionales de los medios- tienen la IB3 que se merecen".
Palma, 12 de marzo de 2010
Etiquetas: A. Martorell, Antich, IB3, Miguel Veny Torres, Nueva Ley de IB3, PSIB, UM